Luxaciones de hombro
- EmergenciasUNO
- 5 ago
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MANUAL DE PEDIATRÍA
Las luxaciones de hombro deben reducirse en el servicio de urgencias, colocarse en cabestrillo, y confirmarse la reducción mediante radiografía.
Posteriormente, revisar cuidadosamente la imagen en busca de fractura del reborde glenoideo (lesión de Bankart). Si se sospecha, solicitar TAC y derivar a traumatología.
Todas las primeras luxaciones deben tener seguimiento con medicina del deporte, fisioterapia o traumatología para valorar riesgo de recidiva.
Niños con luxaciones recurrentes unidireccionales podrían requerir resonancia magnética (RMN) y cirugía.
¿Cómo se clasifican las luxaciones de hombro?
Tipo | Descripción |
Traumática, unidireccional | La más común. Puede requerir cirugía, especialmente en primer evento con lesión estructural. |
Recurrente | Asociada a lesión estructural previa o inestabilidad multidireccional (MDI). |
95% son anteriores | Luxación hacia adelante. |
Atraumática, multidireccional | No cubierta por esta guía. |
Voluntarias (intencionales) | Algunas son parte de un “truco” (más comunes en niños pequeños); deben evitarse. |
Voluntarias con componente psicosocial | Raras, requieren manejo especializado y apoyo psicológico. |
Frecuencia
Más común en adolescentes y adultos jóvenes.
Rara en niños pequeños.
Muy frecuente en deportes con movimientos por encima de la cabeza.
Aumento de casos debido a mayor participación infantil en deportes.
Luxaciones posteriores son poco comunes y suelen asociarse a convulsiones o electrocución.
¿Cómo se presenta clínicamente?
Historia de trauma, típicamente caída o deporte.
En luxación anterior (95%): brazo en abducción y rotación externa (mano extendida hacia fuera o arriba).
Examen físico
No se palpa la cabeza humeral bajo el acromion.
Abultamiento anterior del hombro (cabeza desplazada hacia adelante).
El paciente sostiene el brazo aducido y en rotación interna, con dolor al moverlo.
Puede presentarse luxación autorreducida dolor y movilidad limitada persisten, se requiere radiografía y seguimiento igual.
Hipoestesia o parestesias sobre la cara externa del hombro (zona tipo “insignia”) sugiere lesión del nervio axilar.Debe evaluarse antes y después de la reducción.
Lesión del plexo braquial es rara, pero posible.
Estudios por imágenes
Radiografías:
Primer episodio:
Siempre realizar antes de reducción.
Buscar fracturas óseas (cabeza humeral o glenoides).
Si se sospecha fractura solicitar TAC (no retrasa la reducción).
Recurrencia:
No es necesario retrasar reducción por imagen.
Confirmar reducción post-procedimiento.
Evaluar signos sutiles como:
Lesión de Hill-Sachs (impresión en cabeza humeral)
Fractura del reborde glenoideo
Fracturas del reborde glenoideo derivar a ortopedia y solicitar TAC.
Toda luxación traumática primaria debe tener seguimiento temprano (2–4 semanas) con fisioterapia, medicina deportiva o traumatología.
La RMN precoz puede ayudar a estratificar riesgo de recidiva.
¿Cómo se ve en la radiografía?
Luxación anterior: la cabeza humeral está fuera de la glenoides.
Puede observarse una pequeña densidad en la cara medial de la glenoides que representa una fractura.
Otras imágenes pueden mostrar fractura del reborde glenoideo, que puede ser más evidente en TAC.
¿Cuándo se debe reducir?
Toda luxación no reducida debe reducirse inmediatamente.
Existen múltiples técnicas; lo más importante es la suavidad del método.
En pediatría, la reducción suele realizarse con sedación o analgesia.
Si no se puede reducir en urgencias (raro), puede haber interposición de tejidos o fragmentos óseos requiere reducción quirúrgica.
¿Cuándo derivar a traumatología inmediatamente?
Luxación con fractura aguda (glenoides o húmero proximal)
Luxación irreductible
Luxación con compromiso neurovascular
Sospecha de dislocación voluntaria intencional no reducir sin evaluación previa. Puede requerir intervención del equipo de dolor o psicología.
Presencia de parálisis del plexo braquial
Manejo en urgencias
Reducción
Colocar el brazo en cabestrillo o inmovilizador de hombro por 1–2 semanas máximo
Radiografía post-reducción
TAC inmediato si se sospecha fractura
Evaluación neurológica pre y post reducción, especialmente del nervio axilar
Seguimiento
Todo paciente con luxación debe tener seguimiento
Si hay fractura glenoidea o lesión de Hill-Sachs significativa derivación precoz a ortopedia.
En luxación traumática sin complicaciones:
Seguimiento en 2–4 semanas con traumatología, medicina deportiva o fisioterapia
Considerar RMN para evaluar riesgo de recurrencia
Iniciar fisioterapia en 1–2 semanas:
Fortalecer deltoides, manguito rotador y estabilizadores escapulares
Recidivas traumáticas derivación no urgente a traumatología para considerar estabilización quirúrgica electiva
Consejos para padres
Las luxaciones de hombro son frecuentes.
Existe riesgo de repetición, pero puede manejarse con tratamiento adecuado.
El cabestrillo no debe usarse más de 1–2 semanas.
Iniciar fisioterapia precoz ayuda a prevenir rigidez y nuevas lesiones.
Entregar material educativo impreso sobre el cuidado post-luxación.
Complicaciones posibles
En adolescentes mayores, el riesgo de recurrencia es alto (hasta 90%).
Fracturas no diagnosticadas (como del reborde glenoideo) peor pronóstico si no se manejan temprano
Lesión del plexo braquial: rara, pero posible en traumatismos de alta energía (ej. accidentes de tránsito)
Lesión del nervio axilar: más común que la del plexo, pero suele resolverse espontáneamente
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