Mordeduras Humanas
- EmergenciasUNO
- 14 jul
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MANUAL DE EMERGENCIAS MENORES
Las mordeduras humanas son lesiones traumáticas que pueden provocar desgarros cutáneos, hematomas y, lo más importante, infecciones debido a las bacterias presentes en la boca.
Estas mordeduras pueden ocurrir durante peleas, accidentes o comportamientos agresivos, y son propensas a infecciones por patógenos orales comunes como Streptococcus, Staphylococcus aureus y Eikenella corrodens. Las mordeduras en manos y dedos son especialmente peligrosas debido a la anatomía compleja y al riesgo de infecciones profundas.
Diagnóstico
El diagnóstico se basa en la historia clínica de la mordedura, que generalmente se presenta como una herida en forma de arco con desgarros en la piel, hematomas o punciones. El examen físico debe evaluar el tamaño, la profundidad de la lesión y el estado de los tejidos circundantes.
Es crucial identificar signos de infección como enrojecimiento, hinchazón, dolor y secreción purulenta. En mordeduras que comprometen articulaciones o huesos, deben realizarse radiografías para descartar fracturas o cuerpos extraños. Si se sospecha infección sistémica, pueden requerirse pruebas de laboratorio.
Diagnóstico Diferencial
Condición | Diferencia Clave |
Mordedura de animal | Lesiones similares pero con perfil de patógenos diferente; mordeduras de perro o gato suelen seguir un patrón distinto. |
Herida incisa | Heridas más limpias y lineales, con menor riesgo de infección bacteriana oral. |
Herida por punción | Lesión más profunda pero con menor riesgo de infección polimicrobiana comparado con mordeduras humanas. |
Celulitis | Infección cutánea que puede aparecer tras una mordedura si no se trata adecuadamente. |
Manejo de Emergencia
En el servicio de urgencias, el manejo inicial incluye una limpieza exhaustiva de la herida con solución salina y desbridamiento si es necesario para eliminar tejido necrótico o contaminado.
Se deben administrar antibióticos profilácticos, típicamente amoxicilina/ácido clavulánico, para cubrir los patógenos orales comunes.
Debe actualizarse la vacunación antitetánica si no se ha aplicado recientemente. Las mordeduras en zonas de alto riesgo, como las manos, requieren inmovilización temporal y seguimiento cercano para detectar signos de infección.
Tratamiento Definitivo
El tratamiento definitivo depende del riesgo de infección y la localización de la mordedura. Las mordeduras superficiales sin signos de infección pueden sanar con un adecuado cuidado local.
En mordeduras más profundas o con signos de infección, pueden tomarse cultivos y ajustar los antibióticos según los resultados. Las heridas infectadas suelen dejarse abiertas o con cierre diferido para permitir el drenaje.
En casos graves, como infecciones profundas en manos o articulaciones, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para drenar abscesos o reparar estructuras dañadas. El seguimiento estrecho es esencial para asegurar la resolución de la infección.
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