Mononucleosis infecciosa (fiebre glandular)
- EmergenciasUNO
- 29 nov 2024
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Actualizado: 12 dic 2024
MANUAL DE EMERGENCIAS 2025
La mononucleosis infecciosa, también conocida como “fiebre glandular” o “enfermedad del beso”, es una infección viral causada principalmente por el virus de Epstein-Barr (VEB). Esta enfermedad afecta a adolescentes y adultos jóvenes, aunque puede presentarse en cualquier grupo etario[1][2].
Síntomas
Los síntomas de la mononucleosis infecciosa suelen aparecer entre 4 y 6 semanas después de la infección inicial. Los más comunes incluyen:
Fatiga extrema
Fiebre, generalmente elevada
Dolor de garganta intenso
Dolores de cabeza y cuerpo
Pérdida de apetito
General de Malestar
Es importante destacar que la fatiga puede persistir durante varias semanas o incluso meses después de que otros síntomas hayan desaparecido[2][3].
Signos clínicos
Los signos clínicos más característicos de la mononucleosis infecciosa son:
Linfadenopatía: inflamación de los ganglios linfáticos, especialmente en el cuello y las axilas.
Esplenomegalia: aumento del tamaño del bazo
Hepatomegalia: aumento del tamaño del hígado
Faringoamigdalitis exudativa
Petequias en el paladar
Edema periorbitario
En ocasiones, erupción maculopapular[1][4]
Exploración
Durante la exploración física, el médico buscará los siguientes hallazgos:
Ganglios linfáticos inflamados, particularmente en las cadenas cervicales anteriores y posteriores.
Amígdalas inflamadas y con exudados
Hepatomegalia leve con posible dolor a la percusión.
Esplenomegalia, que suele ser máxima durante la segunda y tercera semana de la enfermedad.
Posible ictericia en casos menos frecuentes[4][5]
Pruebas diagnósticas
El diagnóstico de la mononucleosis infecciosa se basa en la combinación de hallazgos clínicos y pruebas de laboratorio:
Hemograma completo: Suele mostrar linfocitosis con presencia de linfocitos atípicos (>10% de los leucocitos)[4].
Prueba de anticuerpos heterófilos (Paul-Bunnel o Monotest):
Detecta anticuerpos heterófilos, principalmente IgM
Alta sensibilidad y especificidad para infección por VEB
Útil en pacientes mayores de 5 años[5]
Pruebas serológicas específicas para VEB:
IgM contra el antígeno de cápside viral (VCA)
IgG contra VCA y antígeno nuclear (EBNA)[1][5]
Pruebas de función hepática:
Pueden mostrar elevación de transaminasas
Aumento de fosfatasa alcalina y LDH
Ocasionalmente, hiperbilirrubinemia[5]
Manejo de emergencias
El manejo de la mononucleosis infecciosa en el servicio de emergencias se centra principalmente en el tratamiento sintomático y la identificación de posibles complicaciones:
Evaluación inicial:
Valorar el estado general del paciente.
Descartar obstrucción de vía aérea superior.
Evaluar signos de deshidratación
Tratamiento sintomático:
Analgésicos y antipiréticos (paracetamol o ibuprofeno)
Hidratación adecuada
Repositorio relativo
Identificación de complicaciones:
Obstrucción de vía aérea: considerar corticosteroides en casos graves
Rotura esplénica: vigilar signos de dolor abdominal agudo
Complicaciones hematológicas: anemia hemolítica, trombocitopenia.
Criterios de ingreso hospitalario:
Obstrucción severa de vía aérea
Deshidratación de tumbas
Complicaciones hematológicas significativas
Sospecha de rotura esplénica[5][6]
Es importante recordar que los antibióticos no están indicados en el tratamiento de la mononucleosis infecciosa, a menos que se sospeche una sobreinfección bacteriana[3][6].
La mononucleosis infecciosa es una enfermedad viral generalmente autolimitada que requiere un manejo principalmente sintomático. El reconocimiento temprano de sus manifestaciones clínicas y posibles complicaciones es fundamental para un abordaje adecuado en el servicio de emergencias.
Citas
[5] https://www.msdmanuals.com/es/professional/enfermedades-infecciosas/virus-herpes/mononucleosis-infecciosa?ruleredirectid=755
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