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Lesiones de Tejidos Blandos de la Rodilla

MANUAL DE EMERGENCIAS MENORES



Las lesiones de tejidos blandos de la rodilla implican daño a estructuras como ligamentos, meniscos, tendones, músculos y la cápsula articular. Estas lesiones son frecuentes en personas físicamente activas y atletas, y pueden variar desde esguinces leves hasta desgarros graves.


Estas lesiones pueden comprometer la estabilidad, el movimiento y la función de la rodilla, y su manejo adecuado es esencial para prevenir complicaciones a largo plazo como la inestabilidad o la artrosis.


Diagnóstico


El diagnóstico de las lesiones de tejidos blandos de la rodilla se basa en la historia clínica del paciente (mecanismo de la lesión), el examen físico y los estudios de imagen. El examen físico incluye pruebas específicas para evaluar la estabilidad ligamentosa, como el test de Lachman, la prueba de McMurray y el signo de Apley, entre otros.


La resonancia magnética (RM) es el estudio de elección para evaluar lesiones de tejidos blandos, ya que permite visualizar ligamentos, tendones y meniscos, y determinar el tipo y la gravedad de la lesión.


Lesiones Comunes de Tejidos Blandos

Tejido blando

Tipo de lesión

Síntomas principales

Diagnóstico

Tratamiento

Ligamento cruzado anterior (LCA)

Desgarro parcial o completo

“Pop”, inestabilidad, dolor, hinchazón rápida

Test de Lachman, RM

Cirugía (reconstrucción), fisioterapia

Ligamento cruzado posterior (LCP)

Desgarro por traumatismo directo

Dolor, inestabilidad posterior

Prueba del cajón posterior, RM

Conservador o quirúrgico según gravedad

Ligamento colateral medial (LCM)

Esguince o desgarro

Dolor, inestabilidad medial

Prueba de estrés en valgo, RM

Conservador si leve, cirugía si grave

Ligamento colateral lateral (LCL)

Desgarro o esguince

Dolor lateral, inestabilidad

Prueba de estrés en varo, RM

Fisioterapia o cirugía si es grave

Menisco medial y lateral

Desgarro

Dolor, bloqueo, chasquido, hinchazón

Test de McMurray, signo de Apley, RM

Reparación meniscal o meniscectomía parcial

Tendón rotuliano

Tendinitis (“rodilla del saltador”) o ruptura

Dolor anterior, dificultad para saltar o correr

Examen físico, RM

Fisioterapia si tendinitis, cirugía si hay ruptura

Tendón del cuádriceps

Tendinitis o ruptura

Dolor sobre la rótula, debilidad

Examen físico, RM

Fisioterapia si tendinitis, cirugía si hay ruptura

Cartílago rotuliano (condromalacia)

Desgaste o reblandecimiento

Dolor anterior que empeora al subir escaleras

Examen físico, RM

Fisioterapia, AINEs, modificación de actividad

Músculos (cuádriceps, isquiotibiales)

Distensión o esguince

Dolor localizado, limitación del movimiento

Examen físico, RM

Reposo, fisioterapia

Diagnóstico Diferencial

Condición

Diferenciación clave

Luxación de rodilla

Desplazamiento completo de la articulación con deformidad visible.

Fractura de rótula

Dolor anterior con fractura visible en radiografías.

Artrosis de rodilla

Dolor crónico y rigidez articular progresiva, más común en personas mayores.

Bursitis prerrotuliana

Inflamación localizada sobre la rótula, con dolor y tumefacción superficial.

Síndrome de la banda iliotibial

Dolor lateral de rodilla sin inestabilidad ni bloqueo articular.

Manejo en Urgencias


En el entorno de urgencias, el manejo de las lesiones de tejidos blandos de la rodilla se enfoca en controlar el dolor y la inflamación, así como en inmovilizar la articulación en casos más graves. El protocolo RICE (reposo, hielo, compresión y elevación) es la base del tratamiento inicial.


Se administran AINEs (ibuprofeno, naproxeno) para aliviar el dolor y reducir la inflamación. En casos de inestabilidad importante o sospecha de desgarro ligamentoso grave, la rodilla puede inmovilizarse temporalmente con una férula hasta realizar estudios de imagen adicionales.


Tratamiento Definitivo


Tratamiento Conservador


Lesiones leves a moderadas de ligamentos, meniscos o tendones pueden tratarse de forma conservadora con reposo, fisioterapia y fortalecimiento muscular. La fisioterapia es esencial para restaurar la estabilidad y movilidad de la rodilla. Se usan AINEs y terapias de calor/frío para controlar la fase aguda.


Tratamiento Quirúrgico


  • Reparación de ligamentos o meniscos: indicada en lesiones graves o desgarros completos, especialmente en el LCA, meniscos o tendones.


  • Reconstrucción ligamentosa: los ligamentos cruzados (LCA y LCP) suelen requerir reconstrucción con injertos cuando están completamente rotos.


  • La artroscopía es una técnica comúnmente utilizada para reparar o reconstruir estructuras dañadas.


Rehabilitación


La rehabilitación es fundamental en el tratamiento de lesiones de tejidos blandos. Los programas de fisioterapia incluyen:


  • Ejercicios de fortalecimiento muscular


  • Estiramientos


  • Entrenamiento propioceptivo para mejorar la estabilidad de la rodilla


Dependiendo de la gravedad de la lesión y el tipo de tratamiento, el retorno a la actividad física puede tardar desde semanas hasta varios meses.


 
 
 
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