Lesiones de Mano y Lesiones Asociadas
- EmergenciasUNO

- 7 jul
- 2 Min. de lectura
MANUAL DE EMERGENCIAS MENORES
Las lesiones de mano son frecuentes en los servicios de urgencias y pueden comprometer tejidos superficiales como la piel, así como estructuras más profundas, incluidos tendones, nervios, vasos sanguíneos y huesos.
Estas lesiones suelen producirse por mecanismos traumáticos como cortes, aplastamientos, mordeduras o quemaduras. Debido a la complejidad anatómica de la mano, incluso heridas aparentemente simples pueden comprometer gravemente la función si no se tratan adecuadamente.
Diagnóstico
La evaluación de las heridas en la mano comienza con una inspección visual de la lesión, determinando su profundidad, localización y la posible afectación de estructuras importantes. Se realiza un examen neurológico para valorar la sensibilidad y la función motora, así como un examen vascular para confirmar la integridad del riego sanguíneo.
Es fundamental descartar lesiones tendinosas mediante la evaluación de los movimientos activos y pasivos de los dedos. En ciertos casos, pueden ser necesarios estudios de imagen como radiografías para identificar fracturas o cuerpos extraños.
Diagnóstico Diferencial
Condición | Principales Características Clínicas | Diferenciación Clave |
Laceración simple | Cortes superficiales sin afectación de estructuras profundas | Ausencia de déficits neurológicos o funcionales |
Lesión tendinosa | Incapacidad para flexionar o extender los dedos | Déficit motor específico según el tendón afectado |
Lesión nerviosa | Pérdida de sensibilidad distal a la herida | Parestesia o anestesia en zonas inervadas por el nervio dañado |
Lesión vascular | Sangrado pulsátil, palidez distal | Ausencia de pulso distal o signos de isquemia |
Fractura o luxación | Dolor intenso, deformidad visible | Confirmación mediante radiografía |
Mordedura infectada | Eritema, dolor, hinchazón, secreción purulenta | Antecedente de mordedura, signos de infección |
Manejo de Emergencia
El manejo inicial incluye control del sangrado mediante compresión directa e inmovilización de la mano afectada. La herida debe limpiarse con suero fisiológico estéril y, si es necesario, desbridar el tejido no viable. La administración de analgésicos y anestesia local puede ser necesaria para facilitar una evaluación más precisa y el tratamiento.
Si se sospecha lesión tendinosa, nerviosa o vascular, es fundamental evitar movilizaciones excesivas hasta la valoración por un especialista. En casos de heridas por mordedura, se debe iniciar profilaxis antibiótica y actualizar el estado de vacunación antitetánica.
Tratamiento Definitivo
El tratamiento definitivo puede incluir el cierre primario de la herida, reparación quirúrgica de tendones, nervios o vasos sanguíneos, o la reducción y estabilización de fracturas. Las heridas con alto riesgo de infección, como las producidas por mordeduras humanas o de animales, pueden requerir cierre diferido y seguimiento estrecho para asegurar una cicatrización adecuada. La fisioterapia postoperatoria es esencial para una rehabilitación completa y la recuperación de la funcionalidad de la mano.

Comentarios