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Fracturas de la diáfisis humeral

MANUAL DE PEDIATRÍA



La reducción rara vez es necesaria en las fracturas diafisarias del húmero en niños. Por lo general, estas fracturas se realinean adecuadamente por efecto de la gravedad, utilizando un cabestrillo tipo collar y puño (collar and cuff).


Se recomienda control en la clínica de fracturas a la semana, para verificar la alineación y evolución.


Las fracturas espirales del húmero en lactantes y niños pequeños están fuertemente asociadas a maltrato infantil. Siempre se debe realizar una historia clínica detallada y una evaluación física cuidadosa para identificar signos de riesgo.

Clasificación


Las fracturas de la diáfisis humeral pueden clasificarse según:


  • Ubicación anatómica: tercio proximal, medio o distal


  • Tipo de trazo: espiral, oblicuo corto, transversal o conminuto


  • Grado de desplazamiento


  • Presencia de lesión en tejidos blandos: cerrada o expuesta


Frecuencia y mecanismos


Estas fracturas son poco comunes, representando entre 2% y 5% de todas las fracturas pediátricas.


  • Fracturas transversales u oblicuas cortas: suelen deberse a trauma directo


  • Fracturas espirales: por torsión indirecta, como caídas


  • En niños mayores de 7 años, es relativamente frecuente encontrar fracturas patológicas sobre un quiste óseo simple tras traumatismo leve


  • Son la segunda fractura de nacimiento más común


  • En menores de 4 años, toda fractura diafisaria debe levantar sospecha de maltrato no accidental


  • La presencia de una fractura espiral en un lactante requiere investigación formal por riesgo de maltrato


Presentación clínica


  • Dolor, hinchazón y resistencia a mover el brazo afectado


  • Puede haber crepitación


  • La deformidad puede pasar desapercibida debido a la inflamación o la posición del brazo


  • Lesión del nervio radial:


    • Es más frecuente cuando la fractura ocurre en la unión del tercio medio y distal


    • Signos: pérdida de extensión de muñeca y articulaciones metacarpofalángicas, hipoestesia en la cara dorsal del primer espacio interdigital


Estudios por imágenes


  • Radiografías anteroposterior (AP) y lateral del húmero


Hallazgos radiográficos


  • Los trazos más comunes son transversales o espirales


  • Observar signos de fractura patológica como quistes óseos


  • Ejemplo: fractura transversal del húmero en un niño de 6 años


¿Cuándo se requiere reducción?


  • La reducción es poco frecuente


  • El uso del collar y puño permite que el peso del brazo genere tracción natural, favoreciendo la alineación


  • En casos seleccionados, puede utilizarse una férula colgante en “U” de yeso (POP)


Criterios aceptables de alineación:


  • Alineación axial dentro de 10 grados, evaluada por imagen


Indicaciones de derivación inmediata a traumatología


  • Fractura abierta


  • Lesión neurovascular, como parálisis del nervio radial


  • Hinchazón extrema o síndrome compartimental (raro en fracturas humerales)


  • Incapacidad para reducir o mantener la alineación (especialmente si urgencias no tiene experiencia en inmovilización)


  • Fractura patológica


  • Aparición de signos neurológicos posterior a la manipulación del hueso, puede indicar atrapamiento del nervio radial


Manejo inicial en urgencias


  • Fracturas diafisarias del tercio medio se tratan con collar y puño


  • En algunos casos, se aplica una férula colgante en U de yeso


  • Si existe lesión del nervio radial, se debe evitar la manipulación activa


  • El tratamiento es conservador y de soporte, con férula para la muñeca y dispositivos para mantener extensión de los dedos


Seguimiento


  • Todas las fracturas del eje humeral deben ser revisadas en clínica de fracturas al cabo de una semana


  • Las fracturas mínimamente desplazadas pueden ser seguidas por médicos de cabecera con experiencia, si se hace la derivación adecuada


  • Si hay dudas sobre la naturaleza de la fractura, se debe consultar a traumatología desde la presentación inicial


Consejos para padres


  • Es habitual que el niño presente dolor y limitación de movimiento durante 2–3 semanas, requiriendo analgesia regular


  • Dormir con el tronco elevado mejora la comodidad


  • Es importante asistir al seguimiento para verificar la alineación y la función neurológica con radiografía al día 7


  • La consolidación suele completarse en 4–6 semanas, dependiendo de la edad


  • A partir de entonces se inicia la movilización activa


  • Indicar reconsulta si hay aumento del dolor o cambios en la sensibilidad


  • Fracturas bien alineadas en niños sanan con excelente resultado funcional y estético, gracias al fuerte periostio y capacidad de remodelación ósea


Complicaciones potenciales


  • La lesión del nervio radial es poco comúnEstas lesiones suelen recuperarse espontáneamente y el tratamiento es de soporte, con férulas para la muñeca y extensión de dedos


  • Ver otras posibles complicaciones en consulta especializada en clínica de fracturas

 
 
 

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