MANUAL DE EMERGENCIAS 2025
La angina de pecho es una manifestación clínica del síndrome coronario agudo, caracterizada por dolor o malestar en el pecho debido a la falta de suministro adecuado de sangre y oxígeno al corazón. A continuación, se detallan los aspectos más importantes de la angina de pecho:
Síntomas y signos
Los síntomas de la angina de pecho pueden variar entre individuos, pero generalmente incluyen:
Dolor o presión en el pecho, que puede describirse como opresión, ardor o sensación de pesadez[3]
Irradiación del dolor hacia el brazo izquierdo, cuello, mandíbula o espalda
Dificultad para respirar o sensación de falta de aire
Náuseas o vómitos
Sudoración fría
Mareo o sensación de desmayo
Fatiga inusual
Es importante destacar que en las mujeres, los síntomas pueden ser atípicos en el 49% de los casos, lo que puede dificultar el diagnóstico[5].
Exploración clínica
Durante la exploración clínica, el médico debe:
Evaluar los signos vitales (presión arterial, frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria)
Auscultar el corazón y los pulmones
Palpar el pulso periférico
Buscar signos de insuficiencia cardíaca (edema, crepitantes pulmonares)
Realizar un electrocardiograma (ECG) para detectar cambios isquémicos
Manejo en Emergencias
El manejo de la angina de pecho en emergencias debe ser rápido y eficaz:
Evaluación inicial: Realizar una evaluación rápida de los síntomas y signos vitales.
Oxigenoterapia: Administrar oxígeno si la saturación es baja.
Medicación:
Nitroglicerina sublingual: Para aliviar el dolor y mejorar el flujo sanguíneo coronario[2][3]
Ácido acetilsalicílico (aspirina): Para prevenir la formación de coágulos
Betabloqueantes: Para reducir la frecuencia cardíaca y la demanda de oxígeno del corazón[2]
Monitorización cardíaca: Mantener al paciente bajo monitorización continua del ECG.
Analgesia: Administrar morfina si el dolor persiste a pesar de la nitroglicerina.
Pruebas diagnósticas: Realizar análisis de sangre para marcadores cardíacos y considerar estudios de imagen si es necesario.
Estratificación del riesgo: Determinar si el paciente requiere intervención urgente (como angiografía coronaria) o puede ser manejado de forma conservadora.
Tratamiento de la causa subyacente: Una vez estabilizado el paciente, se debe abordar la causa de la angina, que puede incluir tratamiento médico o intervenciones como angioplastia o cirugía de bypass coronario[2].
Es crucial recordar que la angina de pecho puede ser un signo de un problema cardíaco grave y requiere atención médica inmediata. El diagnóstico y tratamiento temprano son fundamentales para mejorar el pronóstico y prevenir complicaciones mayores como el infarto de miocardio.
Citas.
[1] https://www.semanticscholar.org/paper/841dd371179be61b329429346b21bd8e6bd70261 [2] https://www.semanticscholar.org/paper/Tratamiento-m%C3%A9dico-de-las-formas-cl%C3%ADnicas-de-la-de-F.-de/319979192d68e1b3136552155deb8982d562e512
[3] https://www.semanticscholar.org/paper/319979192d68e1b3136552155deb8982d562e512 [4] https://www.semanticscholar.org/paper/Signos-y-s%C3%ADntomas-para-la-detenci%C3%B3n-temprana-del-Tarapues Ceballos/6f3c64b8e3f88315b0201c4ec3f39cf62c388ea9
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